Podemos innovar hasta tanto no nos desvinculemos de la esencia y el objetivo de la misma. La supervisión, sin abandonar ninguna de sus funciones, debe convertirse en factor de calidad, rebasar la fase de la supervisión fiscalizadora e incluso de la llamada supervisión constructiva o democrática y alcanzar la fase de la supervisión creadora, que pone el acento en el desarrollo del talento creador del maestro, centra su preocupación en el estimulo y la promoción de las potencialidades de los educadores sin dejar de controlar y evaluar la actividad educacional. Se puede afirmar que casi todos sistemas educacionales de hoy han logrado borrar, al menos en teoría, la fase exclusivamente fiscalizadora de la supervisión. Muy pocos sin embargo han logrado instituir una supervisión creadora. Para cualquiera que sea el modelo establecido los nuevos tiempos conducen fundamentalmente, como una necesidad a: 1. Reconceptualizar el contenido de las funciones tradicionales de la supervisión y valorar l...
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